IBERIA STAR TIBLISI 12/13 -GEORGIA-
La ilusión de un trabajador el sueño de un genio.
Sin duda alguna jugarán con seis.
En busca de un sueño
Poco podía imaginar Adtanvil Tseretelli que cuando fundó el club, que doce años más tarde por fin vería culminado su objetivo para poder obtener su sueño, ser el más grande de Europa.
Su único rival en Georgia es la TSU Tbilisi, o sea la Universidad Estatal de Tbilisi que compite con lo que puede en una liga de sólo diez equipos y donde domina con puño de hierro sin dar opción a los universitarios en los últimos diez años.
A tal efecto los teflitanos han ido disponiendo de enormes jugadores de mayoría brasileña, y donde destaca como un viejo conocido en la liga nacional , Luiz Negao, un buen pívot que pasó por Triman,
Ver su pabellón, su público, sus campañas sociales con unos videos que no dejan indiferentes, ya indican la fuerza y la ilusión, por no decir pasión, que ponen en todo lo relacionado a su club, para ellos el fútbol sala es su religión. Y en esa religión la comunión de las comunidades georgianas y brasileñas es perfecta, porque sin entender esa manera de ser es imposible estar en el Iberia Star.
Su equipo se caracteriza por ser de un juego alegre, si bien es cierto que la falta de una competición dura les hace un poco blandos en cuidar esas pequeñas cosas que en la alta competición marcan la diferencia entre ganar o perder, también llamados detalles y que otras escuadras dominan mucho mejor que ellos al disponer de unas competiciones mucho más competidas como por ejemplo Rusia, que ahora dispone de una liga muy potente y donde hasta cinco o seis equipos la pueden ganar.
Hay que destacar que ha participado siempre en esta competición, pero curiosamente es la primera vez que se ha metido en el top four, algo inconcebible si miramos las plantillas que ha ido teniendo, incluso recibiendo dolorosas derrotas como el 12-0 que le endosó el Pozo Murcia en la UFC de la temporada 9-10 o la derrota contra el Gyor Eto 11/12 por 2-9.
Pero ahora todo es diferente y después de la Ronda Élite han hecho una cura de autoestima y de la mano de otro viejo conocido de la liga nacional, Sergio Benatti, se presentan como una buena alternativa a llegar a la final, aunque sobre el papel puede parecer la cenicienta de la final a cuatro, en mi opinión no lo es ya que arropados por su público son un mal enemigo.
El Iberia dispone de una portería bien cubierta, nada extraordinario comparado con Dinamo o FC Barcelona pero donde Celinho se impone a Agapov y Jamburia, dos porteros que pueden suplir sin problemas al ex de Santa Fé. Su mejor virtud es la colocación y un buen juego técnico con los pies y con un parecido en su juego a Cidao, el ex de Cajasegovia.
En la línea de creación sorprende que no dispongan de un cierre puro, ya que esa función recae en varios jugadores que son alas puros, pero que se adaptan con más problemas de los previstos. De ellos quien parece que más momentos va a tener desempeñando esa función será Fusté. El de Sao Paulo después de su paso fugaz por el conjunto del Araz, volvió a Brasil a disputar su campeonato en el Poker para fichar una vez finalizado este por el Iberia, coincidiendo con la Ronda Élite. Junto a él también llegó Rafa y Silva, aunque este último ha fichado por Burela.
Junto a él, toda una pléyade de jugadores brasileños pero que tienen un mismo patrón de juego, eso sí, todos disponen de una capacidad diferente a nivel individual pero que a nivel de equipo poco o nada cambia el estilo de juego.
Augusto, su referente arriba es un jugador a seguir, igual que Leo, Romario, Betinho, ojo a este jugador, Roninho, Rafa y al incombustible Lucio que ya sabe que es ganar la Final Four, 2005, con Bruno Melo como director de orquesta, forman un grupo homogéneo y listo para con todo el Tiblisi empujando dar la sorpresa.
Se les suman algún georgiano con poco protagonismo en el equipo, lo que hace del Kairat en la totalidad de su juego un equipo muy combativo, con buenas individualidades pero que sobre el papel es el más flojo de los cuatro, aunque el hecho de jugar en casa y con un ambiente extraordinario en su pabellón, compensa, junto al hecho de ser partido único, las mismas posibilidades que el resto para llevarse esta fina four.
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